viernes, 28 de marzo de 2008

CAPÍTULO VIII: NADIE ESTÁ SOLO

(En capítulos anteriores: A la comisaria Alejandra todo le son problemas. La investigación sobre el asesinato de Jimena María Alcollante no avanza y, para colmo, ahora tiene sobre la mesa otra muerte, la de la Toñi. Laura decide aliarse con Eva para encontrar al asesino que mató a su amiga pero los datos que ella manejaba están ahora en poder de Libertad, la becaria de El madrugador, que ha decidido vendérselo al periódico rival. Marta quiere huir de la ciudad pero Corrales la convence para que se quede. Todavía ignora que el novio de la chica, Alejandro, ha escapado de los calabozos y se ha apoderado de varias armas…)
Los dos principales periódicos de la ciudad competían por la mañana en titulares. El madrugador volvía a destacar con la primicia de la huida de Alejandro de la comisaría. “El detenido por el crimen de Jimena huye armado con varias pistolas”. La verdad desconocía esa información pero, en cambio, llevaba a portada las últimas palabras pronunciadas por la Toñi antes de morir. “Me ha matado una mujer, al igual que a Jimena”, decidió titular finalmente Libertad en la que era su primera crónica en su nuevo trabajo. Ignacio, el director de El madrugador, leyó la prensa rival indignado. Pero Eva le ganó en rabia cuando entró en su despacho. Eduardo la seguía.
- Esta tía es una guarra, por decirle algo fino – gritó la subdirectora – hay que meterle un puro para que se acuerde de lo feo que es robar una información en una redacción y pasársela a otra.
-Ya – respondió lacónicamente Ignacio.
- ¿Pero no la vais a denunciar? ¡Que estaba trabajando aquí y ha publicado en otro medio! Eso es querellable…
- Si al menos le hubiésemos hecho un contrato todavía le podíamos reclamar algo…
- Desde luego que la cosa está fatal. Eso sí. Ella misma se ha cavado su propia tumba. A ver cuánto dura con esas aves de rapiña que hay en La verdad
- No me lo esperaba de ella. Parecía simpática – aportó Eduardo.
- Tú es que tienes un ojito clínico para la gente… - Eva salió del despacho pero antes de cerrar la puerta miró a Ignacio. Parecía abatido - ¿Estás bien? – se interesó.
- Sí, es que últimamente duermo mal.
- Cuídate. Eres el único director que tenemos… - Eva salió del despacho junto al fotógrafo. De repente, Eduardo se detuvo.
- Creo que he tenido una revelación.
- ¿Otra? Estás sembrado últimamente.
- Creo que la que vendió tus fotos simpáticas…
- Es una manera de decirlo.
- La que las vendió fue ella. Libertad robó las fotos a Román y se las dio a La verdad.
- No te inventes absurdeces para salvar a tu colega. Los dos conocemos a Román y ese cabrón le dio mis fotos privadas a su periódico.
- Te digo que no. Román renunció a La verdad para no entregar esas cintas. Me lo dijo a mí. Lo que pasa es que no quiso decirme que fue Libertad la que le robó las fotos.
- ¿Y por qué iba Román a renunciar a su trabajo por mí?
- Tú me llamarás cenutrio algunas veces pero la que no te enteras de nada eres tú. Román aún te quiere. Tanto que ahora está vagando por ahí en busca de un trabajo para no perjudicarte a ti.
El fotógrafo se alejó y dejó pensativa a Eva.

Román tenía frío. Había pasado la noche en la primera jornada laboral en su nuevo empleo y se despertó casi entumecido dentro de su coche. No era, sin duda, el trabajo de su vida pero le pagaban extraordinariamente bien. De todas maneras no entendía muy bien el encargo. Tomar fotos a todos los que entraran en aquel edificio del polígono industrial. Por la noche había habido poco movimiento pero ya le habían avisado que esa tarde se esperaba la llegada de un elevado número de personas. No preguntó la razón de sus imágenes al hombre que le ofreció esa tarea. Se limitó a coger los mil euros de adelanto.

Alejandra colgó el teléfono con brusquedad. La comisaria había recibido la enésima llamada. Esta vez había sido el subdelegado del Gobierno, que le exigía explicaciones y soluciones inmediatas por la huida de Alejandro. Había encargado a todos sus agentes batir las calles de la ciudad en busca del fugitivo pero las primeras horas no habían dado resultado. Llamó a Javier. El policía entró en el despacho tímidamente.
- ¿Deseaba algo?
- ¿Qué novedades hay?
- De momento, no hay rastro. Debe de haberse ocultado en alguna casa pero no creo que haya podido salir de la ciudad. Hay controles en todas las salidas.
- ¡Ten muy claro que si yo caigo con esto, caemos todos! – le gritó al agente – ¡Quiero resultados pronto!
- Estamos intentándolo pero no es fácil.
- Lo que va a ser fácil en cortar cabezas. Sé que quieren la mía.
- Haremos lo que podamos.
- Eso no es suficiente. Quiero mucha cautela. Y tener a la prensa alejada. Sé de algún agente que anda por ahí cantando a los periodistas por peteneras. ¡Y aquí no canta nadie! Si reúno alguna prueba de quién ha sido, será la primera cabeza que ruede por esta comisaría. ¿Me entiendes?
Javier tragó saliva y asintió. Alejandra cogió su arma, la enfundó y abandonó su despacho. El agente frunció el ceño y se mostró indignado. No soportaba que aquella mujer le llamara la atención. Cogió su teléfono móvil.
- ¿Eva? Soy Javi. Necesito verte. Tengo datos muy interesantes que nadie sabe. Es hora de decir todas las verdades.
Al otro lado, la periodista aceptaba la invitación del policía. Por la información que podía prestarle y por buscar una vía de escape. En los últimos días había acumulado demasiada tensión. Cuando colgó, Laura la sorprendió por detrás.
- Hola, Eva.
- ¿Qué tal, Laura?
- Había pensado en que nos reuniéramos los cuatro del equipo de investigación.
- Pero, ¿de qué me hablas?
- Sí de Eduardo, Mauri, tú y yo. Tenemos que ponernos a trabajar ya para encontrar a la asesina de la Toñi y de Jimena, ¿no te parece? He pensado en quedar en mi casa para merendar. Si quieres, traéis vosotros las pastas y yo pongo el tequila.
Eva pensó que sería una buena idea poder tener acceso a la casa de Chaflers y aceptó la invitación con simulada ilusión. Fue entonces cuando, a lo lejos, observó como Libertad entraba en la redacción de El madrugador.
- ¡Seguridad! ¡Que llamen a seguridad! – exclamó la subdirectora.
Laura trató de abalanzarse sobre la ex becaria pero Eva la agarró.
- ¡Ladrona! ¡Da la cara! ¡Que has vendido a la Toñi! ¡No hables más de mi amiga! - se desgañitó Laura.
Libertad se sentó tranquilamente en la que había sido su mesa. En una caja que llevaba en un brazo comenzó a meter varias cosas.
- Sólo he venido a recoger mis cosas. No quiero saber nada de unas ordinarias como vosotras.
- Ordinaria eres tú. Como hubiese dicho la Toñi, lo que tú has montao me lo paso por todo el mandao.
- Desde luego, qué poco nivel hay aquí. Menos mal que ya me voy – Libertad terminó de llenar su caja y pasó desafiante ante Eva y Laura.
- Vas muy equivocada en tu carrera. No sabes lo que estás haciendo – le advirtió la subdirectora.
- Sólo he luchado por mi dignidad.
Libertad abandonó la redacción del periódico con la cabeza alta mientras seguía recibiendo rimas obscenas por parte de Laura.

Marta y Corrales hacían las maletas apresuradamente. La chica lloraba desconsolada. No había podido detener su llanto desde que se enteró de la noticia de la huida de Alejandro. Sabía que iría a por ella. Corrales trató de tranquilizarla pero lo dio por imposible. Se sumó al movimiento nervioso de introducir sus enseres en varias bolsas con las que pretendían huir esa misma tarde. Una llamada a la puerta les hizo temblar. Ambos se miraron y Marta amagó con escaparse por la ventana hasta que sonó una voz.
- ¡Abran! Somos la policía.
Corrales movió la puerta con el pestillo y sólo abrió del todo cuando comprobó la presencia de varios agentes con la comisaria Alejandra al frente. La policía entró en la habitación y observó las maletas.
- ¿Tienen ustedes pensado marcharse de la ciudad?
Marta se derrumbó. Corrales no sabía cómo explicar su presencia en la habitación.
- Ustedes dos tienen mucho que contarnos antes de irse. Les hemos estado vigilando estos días. Es curioso que usted duerma con otro hombre mientras su novio estaba detenido por matar a su hermana.
- No es lo que parece, se lo aseguro – balbuceó la chica.
- Además de vigilarles, les hemos investigado a ambos – dijo Alejandra dirigiéndose a Corrales – y hemos descubierto cosas muy interesantes sobre usted.
- No sé a que se refiere - le respondió simulando indiferencia.
- Mentir no está nada bien. Y menos viniendo de un policía de la unidad central de homicidios. ¿Verdad agente Jorge Corrales?

Las horas pasaron dentro del coche. Román soportó el aburrimiento entreteniéndose con varias latas de coca-cola light y un buen número de bocatas que fueron saciando su apetito. Era el dinero que más fácil iba a ganar pero que menos interesante le estaba resultando conseguir. El fotógrafo se iba a echar la enésima cabezada cuando, a lo lejos, vio a una chica intentando entrar en el edificio. Sacó su teleobjetivo y no tardó en descubrir que era Carmen, la redactora de El madrugador, a la que conocía de varias ruedas de prensa. La chica golpeó varias veces la puerta del edificio y pareció abrirse automáticamente. Entonces desapareció de su vista. En su cámara quedaron almacenadas una decena de fotos.

El edificio estaba oscuro. No se escuchaba a nadie. Carmen avanzó lentamente. No entendía por qué Ignacio y Natalia habían quedado en un lugar tan tenebroso. Supuso que se trataría de algún extraño y morboso juego entre ambos. Estaba dispuesta a desenmascararles. Quería comprobar la traición de su compañera pero, en el fondo, deseaba que todo fuera mentira y que todavía le quedase alguna oportunidad con el director. Siguió caminando pero no encontró nada. Sólo oscuridad y silencio. De pronto, sintió miedo y empezó a temblar.
- ¿Ignacio? ¿Natalia?
Su voz resonó pero no hubo respuesta. Iba tanteando la pared hasta que se detuvo asustada. Había avanzado tanto que ya no sabía el camino de regreso. Atisbó un poco de luz al final de un pasillo. Aceleró el paso pero, cuando pasó junto a una puerta abierta, sintió un profundo golpe en la cabeza. Se desmayó al sentir la sangre que corría por su rostro. Sólo llegó a escuchar una voz metálica:
- La intrusa ha sido interceptada.

Eva y Javi se quitaron el estrés mutuamente tras un suculento almuerzo en la casa del policía. La periodista se incorporó sobre la cama y el chico la rodeó con sus brazos.
- Lo necesitaba, de verdad. No nos va mal juntos, ¿no?
- He de irme, Javi. Tengo una reunión. Me dijiste que tenías algo que contarme.
- Mira, la comisaria Alejandra está muy perdida. Pero temo que su inutilidad nos hunda a todos. Así que prefiero que todo salga a la luz para que la echen rápidamente. Los jefazos se enfadarán todavía más si siguen saliendo datos a pesar del secreto de sumario.
- Al grano, Javi.
- Hay un dato que nadie sabe y que reveló la autopsia de Jimena.
- Pero ya publicamos los resultados de la autopsia. Tú me la pasaste.
- Estaba incompleta. Hubo páginas que se reservaron.
- ¿Y qué decían?
- Jimena había dado a luz sólo cuatro días antes de su muerte.
- ¿Qué?
- Desde entonces estamos buscando a ese niño. Al hijo de Jimena.

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Dioooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!!!....
..
...
......Diooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

No puedo con la emoción! Por dios, Pedro, sigue, no pares (ejem)!! Me refiero a que no pares de escribir. Qué bueno, está genial. La pena es que nadie le echa cuenta a la ensangrentada Carmen. Porque la Jimena tiene un bebé por ahí suelto!!! A ver si va a ser él el gran capucha, que nos ha salido un poco precoz...
En fin, que está genial. Me encantan los diálogos. Luego seguiré comentando otras cosas, porque vaya tela: Libertad, no tengo palabras. Eduardo, ni yo lo habría dicho mejor: Estás sembrao. Román... no sufras, que yo no te quiero pero me caes muy bien (a veces no).
Me lo voy a leer otra vez...

Pd. Pedro, tes quiero. Y, como diría la Toñi, escribe otro capítulo en breve, que me pones el... a punto de nieve!!!

Anónimo dijo...

Ole, ole y ole.
Carmen está ensangrentada por ahí pero, de momento, TODOS SEGUIMOS VIVOSSSS!

Corrales, siempre supe que no eras trigo limpio, pero que seas un agente doble me parece demasiado fuerte.

Libertad, eres lo peor.

Eva, te has puesto puja, en?

Ah, si mañana vamos a merendar... yo pongo el tequila. Qué fuerte, Pedro! No me denigres más!

Anónimo dijo...

DIOOOOOOOOO me sumo a esta gran espectación popular!!! la cosa está cada vez más entretenida y yo me pregunto ¿sabe la hermana de Jimena que acabaa de dar a luz? ¿tndrá el hijo escondido? ¿será Corrales además de agente, fotógrafo y amante el secuestrador del recién nacido?

por dioooo hay que encontrar a ese niñoooooo!!!!!!

Pedro queremos MAS!!

Anónimo dijo...

Pues yo creo que si el agente Jorge Corrales se ha infiltrado como jefe de edición en El Madrugador (por cierto, que trabaja menos que el cuñao de Rocky) es porque la asesina anda por ahí...

Alejandra, espabila, que te están dando puñalás traperas en u cara y ni te enteras!!

Anónimo dijo...

Yo me pregunto qué clase de obseso y acosador es Eduardo, cuando tiene miles de fotos de Jimena y no se coscó de que estaba preñada.

Todo el que piense que el padre del hijo de Jimena es Chaflers se equivoca. Yo sé quién es, pero no lo voy a decir ahora para no romper la emoción.

Con lo que estoy totalmente perdida es con la identidad de la asesina.

Anónimo dijo...

Estoy flipando, me he quedao sin palabras. Necesito tiempo para asimilarlo.

Anónimo dijo...

A ver si la asesina es la criatura de Jimena, que es una niña demoniaca que se vuelve contra su madre por haberla traído a un mundo tan cruel, lleno de traiciones, cuchilladas traperas, sexo sin amor y ambición descontrolada. Luego no tuvo más remedio que acabar con la Toñi, que lo sabía todo.
El misterio quedaría así resuelto (quitando el detalle de cómo maneja un arma un bebé), y sólo tendríamos que centrarnos en la identidad del padre.

Anónimo dijo...

Antes que nada, algo que me ha impactado mucho. Eva, no sabía yo que en vez de un chocho tenías una cubitera. Qué es eso del punto de nieve?.

Bueno, a lo que iba. No sé por qué Laura mete al camarero en un supuesto equipo de investigación si el camarero no sabe nada y lo único que investiga, pa un estudio que está haciendo, es la vida de los gorriones de patinillo. Una especie autoctona gaditana que se dedican a merodear por los patinillos de las casas de vecinas pa picotear las mijitas que amablemente le tiran cuando sacuden los manteles por las ventanas de las cocinas que dan a esos patios interiores.

Vaya novelita. Entre gente mala y putañera, está buena la profesión. Se molestaría Tele 5 en hacer una serie que se llamaba Periodistas idealizandolo todo. En vez de El Madrugador el periódico se debería de llamar 'Puti Clú Marín'.

Anónimo dijo...

Mauri, ¿qué pasa? ¿ya te has olvidado de la Toñi?
Los camareros se enteran de todo y en su emotivo funeral prometiste que tampoco descansarías hasta desenmascarar a su asesina.

Teniendo en cuenta que vuestra amistad duró años y yo sólo la conocía de las últimas dos actuaciones, ¿cómo es posible que yo esté más consternada?

¿No será que la mataste tú disfrazado con las ropas de la Estefi, que estaban guardadas en un baúl desde que se la llevaron las malditas drogas?, en?

Más vale que colabores, que Chaflers te miró con ojitos y sólo podrás escapar si vas a su propia casa, no se arriesgaría a que lo relacionaran con tu asesinato.

Anónimo dijo...

Qué bajuna es la gente!, como diría Eduardo. Yo tengo al enemigo en casa y, encima, queréis que resuelva esto pronto. Ya sabía yo que no me podía fiar de ese Javier. Es basura pura. Yo estoy que no vivo. Rubalcaba, que está muy interesado en el tema, me ha llamado otra vez para pedirme explicaciones y yo no puedo más! Encima la gente ni colabora ni ná.

Yo creo que voy a pedir el traslado a Huelva, que allí seguro que estoy más tranquila. Aunque, ahora que lo pienso, allí le pegan ladrillazos a los policías... Espero que aquí no lleguemos a eso.

Anónimo dijo...

Mucho susto irse ahora a Huelva.
Si quieres estar segura debes ir de incógnito. Es decir, no llevar a la vista cámaras de televisión, micrófonos, grabadoras, porras ni esposas (bueno, estós dos últimos elementos sólo están prohibidos para los policías, no así en los culbs de alterne, o sea, en los puticlús)

Anónimo dijo...

Que arte. Esto es cada vez más emocionante. No puedo con la intriga. Lo del hijo ha sido el elemento sorpresa. La verdad es que nadie lo esperaba. Por cierto que la Claflers tiene razón. Eduardo ha demostrado ser un obseso de pacotilla no dándose cuenta del embarazo.

Creo que la criaturita está en poder de la hermandad, que a las sectas le gustan mucho los niños. No lo digó por nada en paticular. Me baso en lo que veo en las películas. Pero esa pista me lleva a que la invisible puede ser al final la más visible y ser la asesina o al menos estar implicada. Ni se te ocurra Pedro.

Lo siento Carmen pero eso te pasa por meterte donde no te llaman y robarme el vestido con lo mono que era. Creo que tienes dos opciones: meterte en la secta o morir. ¿Tendré que darte la bienvenida hermana con un gran HOSSANA?

Anónimo dijo...

el gran capucha es...EDUARDO
y el padre del niño¡¡¡

y se trasviste para matarrrrr¡¡¡

!DAAAA LAAA CAAAAARAAAAAA¡

Carmen Álvarez dijo...

Q fuerteeeeeeeeeeeeeeee! Yo medio muerta y vosotros a vuestro rollo. Coincido con la invisible, yo creo tb q es ella la asesina. Fue un encargo de la secta, porq Ch.E. no soportaba q Jimena tuviese un hijo de otro hmbre (¿o era el suyo propio?). Q fuerte natalia, no m esperaba esto de ti... además de tontear con ignacio... (q, por cierto, esta muy cansado y no duerme...) Pffffffffff
Es sí, para mi, lo mejor: el detalle de vostros poneis las pastas y yo el tequila... menuda merienda chafflers....
P.D. Acabo de llegar de parís y directa al ordenata... te quejarás de fans, eh pedro?

Jorge dijo...

Por razones de mucho trabajo..!! ejem, ejem, hola subdirectora no he podido leer antes esta pedazo de historia q me ha puesto los bellito a puuuunto de hielooor,, Pedro le has dado un subidon buenisimo!! gran momento el de libertad(arpía)entrando en la redacción y Laura comiendosela toa!! lo del tekila fantastico!! lo del niño al final, la verdad, te lo has sacado de la manga como un buen jugador de poker!! pero te ha quedao del carajo! y que decir del momento donde porfín al agente corrales le ponen nombre!! Ole!